Realizando una búsqueda de la posible relación entre la acupuntura y la
cardiología, he encontrado el siguiente extracto del artículo: Para una integración de las medicinas
tradicionales chinas y occidentales, Revista
Ciencia, vol III, Barcelona, noviembre de 1983, en el blog del Dr. Miquel Masgrau
Bartis: http://www.masgrau.net/index.php?q=es/taxonomy/term/42
La
acupuntura es muy eficaz en el tratamiento de los estados nerviosos que afectan
al corazón, en forma de palpitaciones o trastornos del ritmo cardíaco.
La acupuntura no cura las varices, pero puede hacer desaparecer las molestias que ocasionan. También es efectiva a la hora de eliminar los calambres nocturnos.
La acupuntura no cura las varices, pero puede hacer desaparecer las molestias que ocasionan. También es efectiva a la hora de eliminar los calambres nocturnos.
En cambio,
cuando las disfunciones son debidas a trastornos del mecanismo de la bomba que
impulsa la sangre por todo el sistema circulatorio, lesiones valvulares que dan
lugar a las insuficiencias cardíacas, suelen responder muy bien a los
tratamientos de la medicina oficial. Un caso aparte constituye la angina de
pecho y el infarto de miocardio.
Hoy en día
hay muchos hospitales chinos que tratan con acupuntura las cardiopatías coronarias, reumáticas y las arritmias.
En el hospital número dos de Pequín, que cuenta con un moderno equipamiento y
algunos profesionales formados en Estados Unidos, se presentó una estadística
que comprendía a 300 enfermos de cardiopatía coronaria; 177 hombres/ 123
mujeres, 5,5% por debajo de los 40 años, 28% por encima de los 60; al
electrocardiograma, 201 presentaban signos de isquemia, 48 infarto de
miocardio, 51 arritmia. Según el diagnóstico chino, 84 tenían deficiencia de yin y
exceso de yang, 108 deficiencia de sangre, 57 estancación de flemas
y humedad, 51 deficiencia de qi y estasis de sangre.
Los
resultados del tratamiento fueron los siguientes:
204 - (68%) buenos resultados
84 - (28%) mejorados
9 - sin cambios
3 - empeoraron
204 - (68%) buenos resultados
84 - (28%) mejorados
9 - sin cambios
3 - empeoraron
Total
efectividad 96%
Resultados
según la gravedad de los síntomas:
60 presentaban síntomas graves - 95% de buenos resultados.
183 presentaban síntomas moderados - 95% de buenos resultados.
57 presentaban síntomas leves - 100% de buenos resultados.
60 presentaban síntomas graves - 95% de buenos resultados.
183 presentaban síntomas moderados - 95% de buenos resultados.
57 presentaban síntomas leves - 100% de buenos resultados.
De los que
encontraron mejora:
76,38%
necesitaron sólo 10 tratamientos
16,31% dos series de 10
7,29% tres series de 10
16,31% dos series de 10
7,29% tres series de 10
En 69
enfermos que tenían un ST isquémico a la ECG:
15 se
normalizaron después del tratamiento (4 en una hora, 2 en dos minutos).
9 normalizaron la onda T
9 normalizaron la onda T
Sabemos
hasta qué punto pueden ser engañosas las estadísticas médicas.
Entre las
diferentes especialidades médicas, la cardiología se caracteriza por disponer
de unos medios de exploración que permiten seguir muy de cerca el
funcionamiento de la víscera objeto de su estudio y poner en evidencia la
acción de cualquier terapia. Los sofisticados medios diagnósticos de la moderna
cardiología permiten detectar con gran fidelidad los cambios funcionales del
miocardio. Y así, en el hospital de Pekín, además del resultado de sus trabajos
mostraban en la pantalla del ecocardigrafo un aumento de anchura de la pared
posterior del ventrículo izquierdo inmediatamente después de la inserción de
las agujas. En una estadística que recoge 100 casos diagnosticados de
coronariopatías, la anchura de la pared posterior pasó de 6,841,43 mm. a
8,781,47; el volumen sistólico de 65,5917,63 ml. a 81,7220,9 ml.; y
el volumen minuto de 4,951,47 L/min. a 6,281,84 L/min. Esta mejora de la
función del ventrículo izquierdo no presenta diferencias significativas cuando
se trata de personas con una actividad miocárdica normal, ni después de una
inserción de agujas en puntos escogidos al azar, lo cual demuestra, una vez
más, la especifidad de los puntos de acupuntura y la importancia de la
diferenciación china de los síndromes.
Estos datos
permiten afirmar que la acupuntura es una terapia rápidamente efectiva, exenta
de efectos colaterales y de “royalties”, de gran eficacia para el tratamiento
de la angina de pecho y del infarto de miocardio.
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